1. Uso de Bisfenol A Y PET (Tereftalato de polietileno)
Una de las principales razones para decirle adiós a los botellones es que en su fabricación está involucrado el uso de un producto químico llamado BPA o bisfenol A, el cual es conocido por destruir el sistema endocrino, bloquea la producción de estrógeno (hormona sexual que interviene en la aparición de los caracteres sexuales secundarios femeninos) y altera el sistema endocrino, mimetizando la estructura de los estrógenos y presentando efectos adversos a la salud como diabetes, pubertad temprana, cambios en el comportamiento, reducción de la cantidad de esperma, daño cerebral y propensión a ciertos tipos de cáncer como el de próstata y mama.
El material de las botellas y botellones es cancerígeno: El material de las botellas personales es “PET (tereftalato de polietileno) o PETE 1”: son botellas desechables, que pueden liberar metales pesados y otros químicos que podrían afectar el balance hormonal de las personas.
El PET (tereftalato de polietileno) es el tipo de plástico más utilizado en el mundo. Es importante recordar que está hecho para ser DESECHABLE, es decir, para ser usado una vez. Es necesario tener presente que si se consume agua de este plástico frecuentemente, algunos elementos alcalinos y una gran cantidad de bacterias (que se sienten muy a gusto en el PET) pueden ingresar en tu organismo.
Antes de comprar cualquier tipo de envase o envoltura plástica es mejor pensarlo dos veces; el vidrio es más seguro y puede ser reciclado con mayor facilidad.
2. El plástico es nocivo para el ambiente
La Mayoría de los plásticos tienen su origen en el Petróleo, el cual sale de depósitos naturales que tienen millones de años, es decir un recurso no renovable.
El mundo está superpoblado de botellas plásticas. NO se biodegradan en miles de años. Esto supone una grave contaminación pues muchas de estas botellas jamás son recicladas agrediendo al planeta con sus toxinas.
A parte de tener efectos gravísimos en la salud humana, el plástico es uno de los más peligrosos agentes contaminantes; se estima que al día de hoy existen alrededor de 8 millones de toneladas de plástico en los océanos con el que lidiar. Además de todo el tiempo que se demoran en degradarse (si es que lo hacen), su proceso de fabricación y distribución involucra la utilización de petróleo (100ml por cada botella).
El crudo es extraído de las entrañas de la tierra, las extracciones de crudo son localizadas en casi todos los lugares del mundo en mayor o menor cantidad, aunque desgraciadamente cada vez queda menos, puesto que es un recurso no renovable.
Cuando ya es extraído tiene que ser trasportada a una planta destiladora donde se separan los diferentes hidrocarburos, que tiene el petróleo. La Materia Prima que se requiere para la elaboración de las botellas de plástico es Tereftalato de Polietileno (PET), casi todas las botellas son de plástico virgen, es decir que el 30% del PET del mundo es usado para hacer botellas de plástico para el agua. Lo cual no es bueno por la contaminación directa o indirecta que conlleva el proceso y su destino final.
3. Los botellones de agua no son prácticos
Depender de botellones de plástico para la hidratación en una oficina es una decisión poco práctica, ya que requieren ser reemplazados constantemente. Entonces, además de comprarlos a menudo, deberás realizar la labor logística del traslado y la instalación. Con los dispensadores sin bidón que te ofrecemos en Sin Botellón no tendrás que preocuparte por ninguna de estas cuestiones ya que nuestros equipos se conectan directamente a la red de abastecimiento pública.
Los botellones de 20 litros son muy pesados, llegando a pesar 20 kgs aproximadamente; cargarlo de una manera incorrecta implica tironearse la espalda y provocar una incapacidad, lo cual produciría una pérdida para la empresa, ya que alguien tiene que asumir este costo.
4. Costos
El agua en botellón es 100 veces más costosa que el agua a través de un sistema de filtración en una empresa.
El costo promedio por botellón oscila entre $2 y $3 con un rendimiento de 100 vasos de 7oz por botellón, para un costo por vaso de $0,20.
5. Calidad del Agua
El agua de botellón NO es de un manantial como nos lo han hecho creer. 80% es de acueducto y el 20% de extracción subterránea. Se pueden realizar pruebas de electrolisis, alcalinidad y acidez, y cloro para determinar la calidad del agua.
6. Higiene
La asepsia realizada a los botellones en las plantas que comercializan agua mineral en la mayoría de casos no cumplen los parámetros de higiene y salud.